Tu visión de las alcachofas cambiará con esta receta tan deliciosa como sencilla
Sí, las alcachofas no son muy populares. De hecho, es lo primero que se aparta cuando se come menestra. Pero bien preparadas y con el acompañamiento de los ingredientes correctos, puede ser un plato que enamore hasta a los más pequeños.
No perdamos más tiempo y vamos a preparar tu siguiente logro gastronómico:
- Para empezar, limpiamos las alcachofas, quitando las hojas más verdes y duras que pueden amargar y cargarse la experiencia gastronómica.
- Según las vayamos teniendo limpias, las metemos en un bol con agua y zumo de limón para que no se oxiden y se pongan feas.
- Cuando estén todas limpias, las sacamos del agua, secándolas muy bien con papel de cocina.
- A fuego muy suave, vamos a poner una olla grande con aceite de oliva hasta cubrir las alcachofas.
- Aromatizaremos el aceite con cáscaras de limón, laurel y un par de dientes de ajo.
- Así, se van confitando las alcachofas durante una hora aproximadamente, hasta que queden tiernas.
- Transcurrida una hora, apartamos del fuego.
- Vamos a dejarlas templar y, cuando estén, las sacamos con cuidado de una en una a un plato cubierto con papel absorbente; así soltarán el exceso de aceite.
- Para que queden bonitas, abrimos las hojas formando así una flor en nuestro plato.
- Ahora nos ponemos con el acompañamiento. Para prepararlo, únicamente tenemos que picar todos los ingredientes y saltear en una sartén con un chorrito del mismo aceite que hemos utilizado para confitar.
- Emplatamos poniendo en el fondo el picadillo y encima las alcachofas con un poquito de sal en escamas.
Antes de que lo cates, debemos decirte que estás a punto de cruzar una puerta a un nuevo mundo de sabores.
Esta preparación funciona perfectamente como plato único, pero siempre puedes usarlo como acompañamiento de platos principales. Para ello, puedes echar un vistazo al Recetario de La Abuela Marga. Y, si lo que buscas es un postre, en el Recetario de Valle de las Monjas encontrarás nuestras propuestas.
¡Buen provecho!
