La propuesta del día es un bizcocho de naranja y chocolate que hará las delicias de tus comensales. Tanto para un postre como para un aliciente a la hora del café, esta receta digna del palacio de Buckingham no dejará indiferente a quien la pruebe.
Como intentaremos de cara a un futuro con todas nuestras recetas, la elaboración de esta es muy sencilla. ¡Anímate a compartir un rato con los más pequeños de la casa! ¿Quién sabe si tienes en la cocina a la próxima Jessica Préalpato o al siguiente Jordi Roca Fontané?
¡Ponte el delantal, si lo usas, y lávate las manos bien, porque empezamos!
Elaboración
- Lo primero que debes hacer, para economizar el tiempo, es calentar el horno a 180º mientras vamos preparando todos los ingredientes necesarios. Esto es algo aplicable a cualquier receta que hagas. Si puedes iniciar procesos automáticos que sepas que llevan más tiempo: empiézalos cuanto antes y sigue con el resto de tareas (sin perder de vista el horno, el fuego o lo que sea, por supuesto).
- Mientras se calienta el horno, bate los huevos en un cuenco grande, añade el azúcar y vuelve a batir hasta conseguir una textura cremosa.
- Añade el aceite y sigue batiendo. Busca siempre la mezcla homogénea.
- A continuación, añade la harina, previamente tamizada, junto con la levadura. Y… sigue mezclando, pero ahora con movimientos envolventes.
- Añade la leche y la naranja (triturada).
- Llega el chocolate para que lo podamos llamar bizcocho de naranja y chocolate. Enharina las pepitas (este es un pequeño truco) para evitar que se hundan en la masa hasta el fondo del cuenco. Si hay alguien ayudándote, lo podría estar haciendo desde el principio. Si quieres que tu pincha o pinche se entretenga en la tarea, pídele que enharine las pepitas una a una… El proceso le llevará alrededor de una hora. O bien, puede enharinarlas todas a la vez echándolas en un plato hondo con un poquito de harina. Cuando estén, distribúyelas por la masa y mezcla con un par de movimientos más.
- Cogemos un molde con capacidad de sobra, y volcamos la masa en él.
- Deben haber pasado alrededor de 15 minutos desde que encendiste el horno, por lo que habrá alcanzado la temperatura necesaria para recibir el preparado. Así que metemos el molde y cerramos. Con 35 minutos a 180º bastará para alcanzar el punto óptimo de cocción.
- 35 minutos después ya debería estar doradito, si no, que sería raro, dale unos minutitos más. Cuando esté doradito, apaga el horno y saca el bizcocho.
- Este paso es el más difícil de todos: Déjalo enfriar sin caer en la tentación de coger un pedacito, ¡Aguanta!
¿Has visto qué fácil? Un bizcocho de naranja y chocolate esponjoso listo para ser devorado. Un exquisito manjar digno del más exigente paladar.
Solo resta disfrutarlo a solas o en la mejor compañía.
Si te ha gustado la receta, no te la guardes como un tesoro (aunque lo sea); compártela, que es como se disfrutan estas cosas. Y no te quedes aquí, descubre todo el recetario (que poco a poco irá creciendo) de Valle de las Monjas.
Y, recuerda, si sientes un orgullo irreprimible, comparte tus resultados en nuestras redes sociales.
¡Nos tienes expectantes!